El primer humano vivió medio millón de años antes de lo que creíamos

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Australopithecus afarensis.

Una mandíbula hallada en Etiopía es el resto más primitivo jamás encontrado del género Homo, al que pertenecemos. Hasta ahora existían pocos fósiles bien conservados de los primeros humanos, por lo que no estaba claro cuándo surgió el linaje que dio lugar a los humanos modernos, y por ende a nosotros mismos. Este hallazgo sin precedentes es suficiente prueba para afirmar que los humanos aparecieron antes de los esperado, pues el fósil tiene unos 2,8 millones de años. Los restos más viejos conocidos hasta hoy tenían unos 2,3 millones de años de antigüedad, así que el descubrimiento adelanta a los más antiguos conocidos de nuestro linaje en unos 500.000 años. La pieza ha sido encontrada en el área de investigación de Ledi-Geraru en la región de Afar (Etiopía).

 

Esta mandíbula es el fósil más antiguo perteneciente a nuestro género”, asegura a Teknautas el investigador de la Universidad de Nevada y coautor del estudio, Brian Villmoare. “Esto implica que los Homo aparecieron hace casi 3 millones de años, en fechas similares a las últimas especies de Australopithecus, y además sitúa su origen en el este de África”, añade. Por este motivo, aunque la nueva especie todavía esté sin catalogar (de momento la mandíbula ha sido bautizada con el nombre poco romántico de LD 350-1), el descubrimiento estrecha el hueco existente entre los últimos Australopithecus y los primeros Homo.

sieving-ledi-geraruSegún los expertos gran parte de la anatomía de la mandíbula recuerda a los Homo, pero la barbilla inclinada y la zona frontal es similar en forma y tamaño a la de Australopithecus afarensis. En otras palabras, el espécimen estaría a mitad camino entre ambos géneros.

Dado que datar la antigüedad de un fósil tan viejo a partir de la misma pieza es imposible, los geólogos han determinado la edad de las capas de roca en las que el hallazgo estaba incrustado. Concretamente el equipo dató la ceniza volcánica donde se hallaba la mandíbula incrustada utilizando dos isótopos del argón (Ar40 y Ar39). Este método permitió averiguar cuando tuvo lugar la erupción volcánica de la que procedía la ceniza analizada y con ello, la antigüedad de la mandíbula incrustada en la ceniza.

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Homo habilis

La mandíbula no ha sido el único fósil encontrado en Ledi-Geraru, sino que también le acompañan restos de antílope, animales pastadores, elefantes prehistóricos, hipopótamos y peces. Una fauna que sugiere que esta zona de Etiopía estaba formada por praderas, matorrales y bosques, con un paisaje similar a las llanuras del Serengueti actuales.

Algunos investigadores sugieren que se produjo un cambio de clima hace 2,8 millones de años que aumentó la aridez de esta zonas e impulsó numerosos cambios evolutivos, entre los que se podría encontrar la aparición del primer Homo. “Nuestros datos coinciden con esta hipótesis, pero no todos los fósiles dicen lo mismo”, asegura el investigador de la Universidad del Estado de Pennsylvania Erin DiMaggio, y coautor del estudio, que defiende la necesidad de continuar trabajando al respecto.

El descubrimiento ha sido publicado en la revista Science.

 

Fuente http://www.elconfidencial.com/tecnologia...
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