Las personas que no pueden tener fantasías

Rarísima afección

¿Acaso eso existe? Sí. Las personas que no pueden tener fantasías sufren una extraña condición. Se trata de la afantasía. Fue descrita por primera vez en el siglo XIX, específicamente en 1880. Los portadores son incapaces de visualizar imágenes en su mente. Un nuevo estudio permite detectar esta condición a través del ojo. No existía una prueba diagnóstica que corrobore la condición. Hasta ahora.

Científicos australianos analizaron si la dilatación de la pupila tenía relación con esto. Para demostrarlo, hicieron un experimento. Se realizaron pruebas con un grupo de personas que incluía a quienes se autopercibían con afantasía.

Las personas que no pueden tener fantasías sí existen.
Las personas que no pueden tener fantasías sí existen.

Pupilas quietas

A ambos grupos se les pidió ver imágenes con formas oscuras y más claras sobre un fondo gris. Los dos grupos mostraron respuestas regulares de dilatación de la pupila. Luego se les pidió imaginar las mismas imágenes con los ojos abiertos. Las pupilas de las personas del primer grupo sano se contraían y expandían. En las que sufrían de afantasía, no cambiaban de tamaño de manera significativa.

«Las pupilas responden a la intensidad y la fuerza de una imagen visual que se tiene en mente. Mientras más vívida sea esa imagen, mayor será la respuesta de la luz de la pupila», afirman los autores. Esto permite tener una herramienta imparcial para diagnosticar la afantasía, ya que la respuesta de la pupila a la luz es involuntaria.

Se descubrió que puede detectarse estudiando las pupilas.
Se descubrió que puede detectarse estudiando las pupilas.

Prueba objetiva

«Estamos cerca de una prueba fisiológica objetiva», asegura el autor principal del estudio, el psicólogo Joel Pearson. Trabaja en la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Australia. La investigación fue publicada en la eLife.

La capacidad de formar imágenes mentales no solo ayuda a las fantasías y a los sueños. También ayuda a muchas de las funciones importantes que nuestro cerebro puede realizar. Gracias a este proceso se puede recuperar información de la memoria a largo y corto plazo. Además, se utiliza también para aprender un idioma. E incluso para el sentido de orientación y planeación espacial. Las personas que no pueden tener fantasías tienen mayores dificultades a causa de esto.

Fuente The pupillary light response as a physiological index of aphantasia, sensory and phenomenological imagery strength
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