La impresionante rampa de guerra asiria

Táctica militar sorprendente

¿Cómo pudo hacer aquello el poderoso ejército asirio? En pocas semanas, transportaron 3 millones de rocas. ¿Cuál era fin? Penetrar la defensa de Judea en el 701 a.C. Así se construyó la impresionante rampa de guerra asiria.

La impresionante rampa de guerra asiria es la más grande de su tipo en Oriente.
La impresionante rampa de guerra asiria es la más grande de su tipo en Oriente.

Batalla referida en la Biblia

La batalla de Laquis es una de las más documentadas en la historia antigua. También se describe en la Biblia. Los investigadores querían entender la construcción de una rampa de asedio. Permitió capturar la ciudad de Laquis en el año 701 a. C.

La investigación se publicó en el Oxford Journal of Archaeology. El profesor Yosef Garfinkel y la doctora Madeleine Mumcuoglu estuvieron a cargo. Revisaron textos bíblicos y relieves de piedra que representan escenas de batalla asirias. Se hicieron análisis fotogramétrico con drones en la zona.

Los asirios eran liderados por el rey Senaquerib. Recogieron tres millones de piedras de una cantera cerca de la ciudad. La impresionante rampa de guerra asiria que construyeron con estos materiales fue determinante. Permitió transportar arietes a las defensas de la ciudad. Así rompieron las murallas logrando la destrucción completa de la ciudad.

Se usaron drones para fotografiar la zona arqueológica.
Se usaron drones para fotografiar la zona arqueológica.

Trabajo pesado

La pendiente de asedio asiria estaba hecha de pequeñas rocas. Pesaban alrededor de 6,5 kilos (14,3 libras) cada una. La cuesta de Laquis es la rampa de asedio más grande que sobrevive en el cercano Oriente.

Las piedras fueron transportadas a lo largo de cadenas humanas, pasadas de hombre a hombre a mano. Cuatro cadenas humanas trabajando en paralelo las 24 horas del día. Colocaban hasta 160.000 piedras cada día. «Cientos de trabajadores trabajaban día y noche llevando piedras. Posiblemente en dos turnos de 12 horas cada uno”, señaló Garfinkel en el comunicado.

El trabajo, probablemente, comenzó a unos 80 metros del muro. Los trabajadores construyeron progresivamente más alto y tirando las piedras hacia abajo para avanzar. Al llegar a la muralla, la tumbaron con pesados arietes. Una tecnología pesada y rústica, pero muy eficiente.

Fuente Archaeologists Reveal Secrets of Assyrian War Machine That Conquered Ancient Judah
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