Rhinconichtys y su increíble boca

fosilEn el periodo cretáceo, que tuvo lugar desde hace 145 a 66 millones de años, la naturaleza «nos regaló» algunos de los dinosaurios más llamativos que conocemos, como el Dakotaraptor y el Kosmoceratops. Pero la corteza terrestre no es la única que estaba poblada de increíbles criaturas; los océanos también acogían a criaturas verdaderamente extrañas, como el protagonista de este artículo, el Rhinconichtys. Según afirma un nuevo estudio publicado en Cretaceus Research, con la ayuda de fósiles han podido observar como su boca abarcaba tanto espacio como un paracaídas abierto.

Aunque este género ya era conocido por los paleontólogos, los hallazgos fósiles son muy raros, mostrando diferencias que hacen pensar que, aún siendo de la misma familia, pueden llegar a ser especies diferentes. De hecho, hasta hace poco tan sólo se tenía referencia de un único fósil encontrado en Inglaterra el año 2010. Ahora se sabe que han encontrado hasta un total de tres fósiles, en diversas partes del mundo: Colorado (Estados Unidos) y Hokkaido, Japón.

Este último fue erróneamente identificado con la misma especie de los fósiles originales, y este estudio reciente concluye que se trataba de una especie distinta. «Esto indica lo poco que sabemos acerca de la biodiversidad de los organismos a través de la historia de la Tierra», afirma Kenshu Shimada, paleontólogo de la Universidad DePaul y uno de los autores del estudio. «Es realmente alucinante».

Aunque cada uno tenía sus propias características físicas, los tres Rhinconichtys utilizaban el mismo método de alimentación que actualmente se ve en animales como el tiburón ballena, el tiburón peregrino y las mantarrayas: la alimentación de suspensión, el uso de la boca para atrapar y consumir la presa que flota en el agua, que mayormente es plancton.

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El Rhinconichtys estaba increíblemente adaptado para alimentarse de esta manera: tenía una boca cavernosa que podía abrirse de par en par, gracias a unos huesos llamados hyomandibulae, que formaban una palanca en forma de remo. Esto significaba que su mandíbula superior e inferior podía extenderse prácticamente en posición paralela, lo que permitía a esta especie alimentarse de grandes cantidades de plancton de una sola vez.

De hecho, lo más probable es que estos animales se pasasen la mayor parte de sus días nadando con la boca completamente abierta. Curiosamente, a diferencia de muchos animales que se alimentan de esta misma manera, tenían ojos bastantes grandes; eran más propensos a utilizar su visión para detectar a grandes depredadoras que para detectar plancton.

Por desgracia, a pesar de que los cráneos de estos peces han sido bastante bien conservados, el resto de sus cuerpos no lo ha sido. Esto significa que gran parte de la anatomía del Rhinconichtys sólo puede ser tomada como referencia de otras especies con la que comparten algunas similitudes, incluyendo su tamaño. Por ejemplo, el ejemplar inglés era más pequeño que los otros dos, lo que podría sugerir que era de menor edad, mientras que los fósiles japoneses y estadounidenses eran adultos. Con estas referencias, podría deducirse que un adulto completamente desarrollado de Rhinconichtys podría llegar a medir 2,7 metros de longitud.

Los Rhinconichtys pertenecían a un grupo de peces con nombre paquicórmidos, que se extinguieron junto con los dinosaurios no aviares a finales del Cretácico.

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