Al norte del Perú se encuentran los vestigios de una antigua civilización. Es la más vieja del continente. Sus ruinas levantan un halo de misterio: el misterio de la ciudad de Caral.
Existe la idea de que la cuna de las civilizaciones viejas está en Mesopotamia, hace más de tres milenios. Pero en América ya se estaban sentando las bases de un pueblo un poco más antiguo. Al norte del Perú existió una ciudad sagrada 2 mil años antes. Tuvo decenas de templos y complejos habitacionales. Hoy solo quedan ruinas de la ciudad sagrada de Caral.
Alta complejidad
Los vestigios más antiguos tienen 5 milenios. Es uno de los «focos originarios de cultura en el mundo«. En los últimos 30 años se desenterraron muchos edificios en forma de pirámides. Posiblemente, las primeras que se construyeron en los Andes. Éste fue el centro de la vida en la ciudad sagrada.
Las pirámides fueron el símbolo del poderío económico y militar de Caral. Se llevaban allí a cabo las fiestas más importantes a lo largo del año. Cada una estaba alineada al ciclo calendárico. Este emulaba los ciclos de la naturaleza.
En total, se han registrado 6 estructuras piramidales. «Atestigua el grado de desarrollo y complejidad alcanzado por la civilización de Caral», dijo la describió la UNESCO. Se necesitó tecnología precisa para construirlas.
Desarrollo agricultor
El descubrimiento de las pirámides en Caral permitió descartar una hipótesis previa. Los historiadores y arqueólogos estudiaron el desarrollo de la agricultura de esos tiempos. Pensaban que en la región de los Andes sólo se habían desarrollado algunos tubérculos. Esta concepción errónea cambió tras el Proyecto Especial Arqueológico Caral – Supe (PEACS). En 1994, desveló la grandeza de la ciudad sagrada —la más antigua del continente.
El misterio de la ciudad de Caral maravilla a los turistas que la visitan. No fue hasta 2009 que fue catalogada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
