Hemos podido presenciar en millones de historias fantásticas a los unicornios, pero nunca podríamos pensar que existieran de verdad. Pues existen, no exactamente esos seres mitológicos sino unos seres marinos, es una rara especie de ballena ártica a la que llaman Narval.
Científicamente es la Monodon monoceros aunque comúnmente se las conoce como ballenas unicornio o unicornios marinos.
Tienen un enorme cuerno de marfil que sale del lado izquierdo de la mandíbula superior, es decir que más que un cuerno es un diente que llega a medir dos metros de largo. Normalmente el cuerno de los machos son más largos, pero hay hembras que se pueden equiparar a ellos.
Se cree que este cuerno les es útil para defenderse de sus depredadores y para la lucha por la reproducción aunque hay teorías que añaden que les sirve como receptor sensitivo, en algunos casos este apéndice ha llegado a alcanzar los diez kilos.
Los solemos encontrar en las aguas que hay entre Rusia y Canadá, sus mayores enemigos son las orcas y osos polares. Miden alrededor de los cinco metros de largo y pesan más o menos 1.600 kilos. Es una de las especies de mamíferos que pueden sumergirse más profundamente, 800 metros aproximadamente.
