Los aviones dejan una huella de carbón en la atmósfera. Es conocido su poder contaminante. Muchas personas evitan viajar en avión por este motivo (la famosa Greta, por ejemplo). ¿Qué alternativas hay? La que propone Airbus. El primer avión propulsado con hidrógeno, un combustible totalmente limpio.
Originales prototipos
Presentaron 3 tres nuevos prototipos con cero emisiones, y podrían estar en funcionamiento a partir de 2035. El 2050 es la fecha límite de la Unión Europea para la neutralidad de carbono. Es decir, equilibrar la cantidad de CO2 liberada con la capturada de forma natural. Por eso la industria de la aviación deberá reinventarse. La compañía aeronáutica Airbus dio el primer paso con los prototipos ZeroE. Son aviones comerciales impulsados por íntegramente con hidrógeno.
Son tres modelos. Cada uno representa un enfoque distinto en función de la tecnología aplicada. Dos de ellos se basan en modelos existentes: reactores y turbohélices. El tercero se denomina ‘cuerpo de ala mixta’: las alas se fusionan con el cuerpo principal de la aeronave. Todos ellos se basan en el hidrógeno como fuente de energía primaria.
Cambiando el entorno
La utilización del hidrógeno cono fuente de energía para las aeronaves no es una idea nueva. Pero sí para la aviación comercial. El motivo: las dificultades de obtención y almacenamiento del combustible. Requiere de hasta cuatro veces más volumen que el combustible convencional. Esto obliga a buscar espacios adicionales (en detrimento de la carga o el pasaje).
Además, el hidrógeno líquido se obtiene a una temperatura de unos -200 grados centígrados y debe comprimirse a altas presiones. Es necesario el desarrollo de una suerte de ‘tanques criogénicos’ que deberían colocarse en el interior de la aeronave.
No solo eso. La transición al hidrógeno requerirá de un replanteamiento de todo el ecosistema de la aviación comercial. Solo será posible si se recibe el apoyo suficiente de los gobiernos y los proveedores industriales. Los aeropuertos requerirán de importantes cambios, entre ellos de una nueva infraestructura que permita almacenar y repostar el combustible.
El desarrollo del primer avión propulsado por hidrógeno no soluciona por sí solo el problema. Un estudio publicado en 2016 en la revista Science señala que será vital una importante inversión logística.
La compañía aeronáutica también deberá garantizar que el hidrógeno empleado se obtuvo de forma limpia. Para ser totalmente verde, debe ser obtenido íntegramente a partir de energías renovables. Esta alternativa 100% sostenible es todavía poco común en el mercado.
Parece muy lejano todavía ese día. Pero el tiempo se pasa… volando.
