Se cree que los egipcios ya realizaban prótesis capilares utilizando un cabello totalmente natural.
Ann McDonald es el nombre de la mujer que debido a su calvicie decidió usar una peluca que disimulara su falta de pelo, pero en un tiempo parece que se aburrió de ella y decidió pasar a algo más drástico.
La mujer de 60 años de edad perdió todo su cabello debido a la alopecia, y cansada de usar pelucas decidió tatuarse en la cabeza un bonito pelo.
Ella afirma que el pelo sintético era muy feo, incómodo y que la hacía sentirse más fea y algo deprimida, por lo que tomó la decisión de hacerse un tatuaje que simulara un peinado.
Emplearon alrededor de 12 horas en realizarle el tatuaje y le costó unos mil dólares, pero a pesar de toda la mujer afirma estar contenta con el resultado, y que le gusta que la gente la mire por la calle y admiren el gran dibujo que cubre su cabeza.
